Los sueños alimentan la creatividad y las letras fluyen de los dedos como suspiros…
Otras veces,
en cambio…
Son pesadillas que bloquean los sentidos y estancan cada una de las memorias que parecen no encontrar salida.
En la garganta se encierran, como un grito desesperado que no logra estallar y se encaja como una daga en el pecho. Matan lentamente cada una de las ilusiones y los deseos se convierten en cenizas…
Son besos no recibidos. Peregrinares con los ojos cerrados.
«Lifted», fotografía surrealista de Brooke Shaden
enero 20th 2018 Joyas de todos los días, Joyas fotográficas, Joyas interiores