Para qué contar una historia que ha sido más que contada, conocida por quienes quieren conocerla y visitada por quienes tienen la fortuna de hacerlo. No tiene caso mencionar que al visitarla, el respiro desaparece ante la magnitud de la belleza que circunda la presencia de quien pisa el lugar.
Cuando se dice Capilla Sixtina un nombre viene a la mente: Miguel Angel . Pocos saben que el artista pintó únicamente la bóveda y el ábside (la parte posterior del altar principal) motivo de controversias y divisiones entre los clérigos de esa época que censuraron la desnudez de la obra. El resto de los afrescos que decoran las paredes son de varios artistas, reconocidos y no tanto: Perugino, Pinturicchio, Botticelli, Piero di Cósimo, Ghirlandaio, Cósimo Rosselli y Rafaello que realizó los tapices que decoraban la parte inferior de las paredes.Este es el exterior del edificio.
Te invito a entrar. . . ¡Sin hacer fila!
Espero que un día puedas visitarla, si no lo has hecho y así lo deseas.
En este otro link, un paseo por el Vaticano y sus secretos conocidos.
Buen domingo,
Peregrina