Madre Tierra, contemplo tu grandeza y me gozo en la belleza de tus infinitos rincones que esconden los secretos de la sabiduría milenaria de tu creación y recreación continua, pasada, presente y futura.
Si comprendiéramos que el día de la Tierra es todos los días, si así lo viviéramos, no tendríamos por qué idear proyectos para salvar su belleza.
Peregrina.
abril 22nd 2010 Joyas de todos los días, Joyas interiores